Oh Señor Todopoderoso, en este momento me postro ante Ti con humildad y devoción, pidiendo por San Ananías, siervo fiel y ejemplo de tu amor incondicional.

En tu infinita bondad, te alabo y te glorifico, reconociendo tu grandeza y misericordia que se reflejan en la vida de San Ananías, quien llevó tu luz a los corazones necesitados.

Te doy gracias, Dios misericordioso, por el don de San Ananías en nuestras vidas, por su valentía y fidelidad a tu palabra, por ser instrumento de tu amor y guía en momentos de oscuridad.

Me arrepiento sinceramente, Señor, por mis faltas y pecados, y te pido perdón en nombre de San Ananías, para que su intercesión fortalezca mi espíritu y me acerque más a Ti.

Te suplico, oh Dios compasivo, que escuches mis peticiones y necesidades, que encomiendo a tu infinita misericordia por mediación de San Ananías, quien confió plenamente en tu providencia.

Intercede por mí, San Ananías, ante el trono de la gracia divina, para que mis súplicas sean escuchadas y mis cargas aligeradas, y para que tu ejemplo de fe inspire mi camino.

Con espíritu consagrado, me entrego a Ti, Señor, por la intercesión de San Ananías, ofreciendo mi vida como sacrificio vivo, dispuesto a seguir tus designios con amor y entrega total.

Te ruego, Padre Celestial, derrames tus bendiciones sobre San Ananías, fortalécelo en su misión, cúbrela con tu manto de protección y paz, y llénalo de tu gracia y amor infinitos.

Que esta oración por San Ananías sea fragancia agradable a tus oídos, oh Dios, y que su ejemplo de servicio y entrega inspire nuestras vidas a seguir siempre tu voluntad. Amén.