Oh Dios misericordioso, te imploro en este momento por la intercesión de San Doroteo, quien con su ejemplo de fe y devoción nos enseña a seguir tus caminos con amor y humildad.
En tu infinita bondad, te alabo y te glorifico por la vida de este santo, quien con su entrega total a ti, ha sido un faro de luz en medio de la oscuridad, inspirando a muchos a seguir tus enseñanzas con fidelidad y alegría.
Te doy gracias, Padre celestial, por la presencia constante de San Doroteo en nuestras vidas, por su guía sabia y su amor incondicional que nos impulsa a crecer en la fe y en la caridad.
Me arrepiento de mis faltas y pecados, consciente de que he fallado en seguir tu voluntad de la manera en que San Doroteo lo hizo. Te pido perdón por mis errores y te suplico que, por la intercesión de este santo, me concedas la gracia de la reconciliación y la renovación espiritual.
Padre celestial, en este momento te presento mis más sinceras peticiones. Te ruego por la salud, la paz y la prosperidad de todos aquellos que necesitan tu ayuda, especialmente por aquellos que están atravesando momentos difíciles en sus vidas.
Te pido, Señor, que escuches las súplicas de San Doroteo en favor de los más necesitados, de los enfermos, de los solitarios y de los desamparados. Que su intercesión sea un bálsamo de consuelo y esperanza para todos aquellos que sufren.
En un acto de entrega total, consagro mi vida a ti, oh Dios, por medio de la intercesión de San Doroteo. Que mi existencia sea un testimonio vivo de tu amor y misericordia, y que en todo momento pueda reflejar tu luz y tu verdad a aquellos que me rodean.
Te pido, Señor, que derrames tus bendiciones sobre San Doroteo, que lo cubras con tu manto de protección y lo colmes de paz y gracia. Que su intercesión sea siempre eficaz y su amor por ti sea recompensado con tu eterna compañía en el cielo.