Claro, aquí tienes la oración:
“`html
Oh Dios Todopoderoso, en este momento me acerco a Ti con humildad y devoción, para pedir por San Jairo, siervo fiel que ha guiado con amor y sabiduría. Escucha nuestra súplica y permite que tu luz ilumine su camino, llenándolo de fortaleza y consuelo en todo momento.
En tu infinita bondad, te alabamos y te bendecimos por la presencia de San Jairo en nuestras vidas. Su ejemplo de amor incondicional y entrega desinteresada nos inspira a seguir tus enseñanzas con fervor y gratitud. Que su testimonio nos impulse a ser mejores seguidores de tu camino, sirviendo con generosidad y compasión a nuestros semejantes.
Te damos gracias, oh Señor, por los dones y las bendiciones que has otorgado a San Jairo. Su labor incansable en tu obra y su dedicación a tu servicio son testimonio de tu amor inagotable. Permítenos, en unión con él, valorar cada día tus regalos y responder con fidelidad a tu llamado, llevando tu luz a todos los rincones del mundo.
Con humildad y contrición, nos arrepentimos de nuestros pecados y errores, reconociendo nuestras debilidades y flaquezas. Te pedimos perdón, oh Señor, por las veces que hemos fallado en seguir tu voluntad y en imitar el ejemplo de San Jairo. Concédenos la gracia de la reconciliación y la renovación, para que podamos caminar en tu luz con rectitud y pureza de corazón.
Dios misericordioso, encomendamos a tu cuidado a San Jairo, solicitando tu protección y guía en su camino. Permítele experimentar tu amor de manera profunda y cercana, fortaleciéndolo en los momentos de tribulación y consolándolo en las horas de soledad. Concédele, Señor, la fuerza y la sabiduría necesarias para cumplir con fidelidad su misión y ser instrumento de tu paz en el mundo.
Te pedimos, oh Señor, que San Jairo interceda por nosotros ante tu trono de gracia, presentando nuestras peticiones y necesidades con amor y compasión. Concédenos la gracia de experimentar tu presencia sanadora y liberadora en nuestras vidas, renovando nuestra fe y nuestra esperanza en tu poder salvador. Que la intercesión de San Jairo nos fortalezca en la adversidad y nos guíe por el camino de la verdad y la vida eterna.
En un acto de consagración total, nos entregamos a Ti, oh Dios, por intercesión de San Jairo, comprometiéndonos a seguir tus mandamientos y a vivir conforme a tu voluntad. Que nuestra vida sea un reflejo de tu amor y tu gracia, manifestando en cada acción y palabra la presencia viva de tu Espíritu en nuestro ser. Que nuestra entrega sea total y generosa, imitando el ejemplo de San Jairo en su entrega y servicio a los más necesitados.
Te pedimos, oh Señor, que derrames tu bendición sobre San Jairo, protegiéndolo de todo mal y otorgándole paz y alegría en abundancia. Que tu gracia lo acompañe en cada paso, fortaleciéndolo en la fe y en la esperanza, para que pueda continuar su labor con renovado ánimo y entusiasmo. Que su vida sea un testimonio vivo de tu amor y tu misericordia, atrayendo a muchos hacia Ti y siendo fuente de inspiración y consuelo para todos los que lo rodean.
“`