Oh Dios Misericordioso, en este tiempo de Adviento me acerco a ti con humildad y devoción, pidiendo que tu luz y amor iluminen mi camino y fortalezcan mi fe.
Te alabo y te bendigo, Señor, por tu infinita bondad y misericordia, por tu amor incondicional que nos sostiene y nos guía en todo momento, especialmente en este tiempo de preparación para la llegada de tu Hijo.
Te doy gracias, Padre Celestial, por las bendiciones que has derramado sobre mí y por tu constante protección. En este Adviento, reconozco tus dones y tu presencia en mi vida, y te agradezco por tu amor inagotable.
Me arrepiento de mis faltas y pecados, Señor, y te pido perdón por todas aquellas veces en las que he fallado y me he alejado de tu voluntad. Permíteme encontrar la paz y la reconciliación en tu perdón, y ayúdame a enmendar mis caminos.
En este tiempo de Adviento, te pido, Señor, que me concedas la sabiduría y la fortaleza para enfrentar los desafíos que se presenten en mi vida. Que tu Espíritu Santo me guíe y me fortalezca, y que tu gracia me sostenga en todo momento.
Intercede por aquellos que más lo necesitan, oh Señor, y escucha las peticiones de sus corazones. En este Adviento, te suplico por la paz en el mundo, por la sanación de los enfermos, y por el consuelo de los afligidos. Amén.
Me consagro a ti, Señor, en este tiempo de Adviento, ofreciéndote mi vida y mi corazón. Que mi fe sea firme y mi amor por ti sea sincero, para que pueda seguirte con fidelidad y devoción en todo momento.
Que tu bendición descienda sobre mí, oh Dios, y me cubra con tu protección y tu gracia. En este tiempo de Adviento, guíame por el camino de la verdad y la luz, y permíteme experimentar tu amor de manera más profunda y significativa. Amén.