Oh Dios Todopoderoso, Creador del cielo y la tierra, te invocamos con humildad y reverencia para que cuides de tu creación con amor y misericordia. Tú que formaste el mundo con tu palabra y lo llenaste de vida, te pedimos que guíes nuestros pasos para preservar la belleza y la armonía de todo lo que nos rodea.
En tu infinita bondad y sabiduría, manifestamos nuestra alabanza y gratitud por el regalo maravilloso de la creación. Admiramos la magnificencia de tus obras y reconocemos tu mano divina en cada ser vivo, en cada rincón de la naturaleza. Que nuestra adoración sea un eco de la perfección de tu creación, oh Señor.
Te damos gracias, Padre celestial, por las bendiciones que nos brindas a diario a través de tu creación. Desde el amanecer hasta el anochecer, encontramos en cada detalle la manifestación de tu amor insondable. Te agradecemos por el aire que respiramos, por los alimentos que nos sustentan y por la belleza que nos rodea.
Con humildad y contrición, reconocemos nuestras faltas y errores que han contribuido al deterioro de la creación. Pedimos tu perdón, oh Dios compasivo, por nuestra falta de cuidado y responsabilidad hacia el medio ambiente. Concédenos la gracia de enmendar nuestros caminos y restaurar la armonía perdida.
Te suplicamos, Señor, que nos ayudes a ser buenos administradores de tu creación, a protegerla y preservarla para las generaciones futuras. Que nuestras acciones reflejen el respeto y la gratitud que debemos a todo lo que nos has dado. Fortalécenos en nuestra labor de cuidar y sanar la tierra, en nombre del Creador de todo lo visible e invisible.
Intercede por aquellos que sufren a causa de la destrucción del medio ambiente, por los animales que son maltratados y por las comunidades que padecen los efectos del cambio climático. Que tu justicia divina se manifieste en la protección de los más vulnerables y en la restauración de la armonía en tu creación.
Te consagramos, Señor, nuestra vida y nuestras acciones en favor del cuidado de la creación. Que cada paso que demos, cada decisión que tomemos, esté guiada por el amor y el respeto hacia todo lo que has creado. Que nuestra existencia sea un testimonio vivo de tu providencia y cuidado constante.
Que tu bendición descienda sobre nosotros, sobre nuestro hogar común, la tierra, para que florezca en plenitud y armonía. Que la paz y la justicia reinen en cada rincón del planeta, y que la gracia divina nos acompañe en nuestro compromiso de proteger y preservar la creación para las generaciones venideras. Amén.