Oh Dios, Padre misericordioso y compasivo, te pido en este momento por San Abdías, tu siervo fiel y devoto. Que su ejemplo de fe y entrega nos inspire a seguir tus caminos con humildad y amor.
Te alabamos, Señor, por la vida ejemplar de San Abdías, por su valentía en la defensa de la fe y por su dedicación a tu obra. Que su testimonio sea una luz que guíe nuestros pasos hacia ti.
Te damos gracias, Dios todopoderoso, por el regalo de San Abdías en nuestras vidas. Por sus oraciones y su intercesión, por su protección y su amor incondicional. Que su presencia siga bendiciéndonos cada día.
Señor, reconocemos nuestros errores y pecados, y te pedimos perdón por todo aquello que nos aleja de ti. Que San Abdías interceda por nosotros ante tu trono de gracia, para que podamos experimentar tu perdón y tu misericordia.
Te suplicamos, oh Dios, por las necesidades y los deseos de nuestro corazón. Que San Abdías sea nuestro intercesor ante ti, llevando nuestras peticiones con humildad y confianza. Concédenos, según tu voluntad, lo que más necesitamos.
Te rogamos, Señor, por todas las intenciones que guardamos en nuestro corazón. Que San Abdías sea nuestro mediador ante ti, presentando nuestras súplicas con amor y fervor. Escucha nuestras peticiones y derrama tu gracia sobre nosotros.
Nos consagramos a ti, oh Dios, por intercesión de San Abdías. Te ofrecemos nuestra vida, nuestros sueños y aspiraciones, nuestra fe y nuestra esperanza. Que todo lo que hacemos sea para tu gloria y tu honra.
Te pedimos, Señor, que bendigas a San Abdías con tu amor inagotable, con tu paz que sobrepasa todo entendimiento, con tu protección que nos guarda de todo mal. Que su vida sea un reflejo de tu gracia y tu misericordia.