Oh Dios misericordioso y bondadoso, en este momento me acerco a Ti con humildad y devoción para pedirte por San Adalberto, quien dedicó su vida a servirte con amor y entrega. Te ruego que lo bendigas y lo protejas en todo momento, guiándolo por el camino de la fe y la virtud.
En tu infinita sabiduría y bondad, te alabo y te glorifico por las maravillas que has obrado a través de San Adalberto. Su valentía, su entrega y su amor por Ti son ejemplo para todos nosotros, y en este momento te doy gracias por permitirnos contar con su intercesión y su ejemplo en nuestra vida.
Señor, en este momento de oración quiero agradecerte por las bendiciones que has derramado sobre San Adalberto, por la fuerza y la sabiduría que le has otorgado para cumplir con su misión en este mundo. Te doy gracias por su testimonio de fe y por su valentía al defender la verdad y la justicia.
Perdóname, Señor, por mis pecados y mis faltas, por las veces que he fallado en seguir tu voluntad y en imitar el ejemplo de San Adalberto. Te pido perdón por mis debilidades y mis errores, y te ruego que me ayudes a enmendar mis caminos y a seguir fielmente tus enseñanzas.
Te pido, Dios misericordioso, que escuches mis súplicas y mis peticiones por San Adalberto. Te ruego que le concedas fortaleza en sus momentos de debilidad, consuelo en sus momentos de dolor y sabiduría en sus decisiones. Que tu luz y tu amor lo guíen siempre por el camino de la verdad y la justicia.
Intercede por nosotros, San Adalberto, ante el trono de la gracia divina. Ruega por nuestras necesidades y por nuestras intenciones, especialmente por aquellos que más necesitan de tu ayuda y tu protección. Que tu intercesión nos fortalezca en la fe y nos anime en la esperanza.
Me consagro a Ti, Señor, por intercesión de San Adalberto, ofreciéndote mi vida y mi corazón como sacrificio vivo y agradable a tus ojos. Que mi existencia sea un testimonio de tu amor y tu verdad, y que mi servicio sea siempre para mayor gloria de tu nombre.
Te pido, Señor, que derrames tu bendición sobre San Adalberto, protegiéndolo de todo mal y peligro, fortaleciéndolo en su misión y llenándolo de tu paz y tu gracia. Que tu mano poderosa lo sostenga en todo momento y lo guíe por el camino de la santidad.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, te ofrezco esta oración por San Adalberto, confiando en tu amor y tu misericordia. Amén.