Oh Dios misericordioso y bondadoso, en este momento me acerco a Ti con humildad y devoción para pedir por San Tadeo, apóstol fiel y valiente que dedicó su vida a difundir tu palabra y llevar tu amor a los corazones necesitados. Te ruego, Señor, que escuches mis palabras y bendigas a San Tadeo con tu gracia y protección eterna.

En tu presencia, Dios Todopoderoso, quiero alabarte y exaltarte por la vida ejemplar de San Tadeo, por su valentía y su entrega total a tu voluntad. Que su ejemplo de fidelidad y amor incondicional hacia Ti sea una inspiración constante para todos nosotros, y que su intercesión nos guíe por el camino de la verdad y la rectitud.

Doy gracias a Ti, Señor, por la presencia constante de San Tadeo en mi vida, por su intercesión poderosa y su protección amorosa. Gracias por las bendiciones que ha derramado sobre mí a través de su intercesión, por las respuestas a mis oraciones y por la paz que siento al saber que él vela por mí desde el cielo.

En este momento de reflexión y arrepentimiento, te pido perdón por mis faltas y errores, por las veces que he fallado en seguir tu camino y en amar a mis semejantes como a mí mismo. Te ruego, Dios misericordioso, que tengas piedad de mí y que me concedas la gracia de la reconciliación y la renovación espiritual por la intercesión de San Tadeo.

Padre Celestial, encomiendo a tu bondad todas mis necesidades y deseos, confiando en que Tú conoces lo que es mejor para mí. Te pido que, por la intercesión de San Tadeo, me concedas la fuerza y la sabiduría para superar los desafíos que enfrento, y que tu luz divina ilumine mi camino en todo momento.

Te ruego, Dios de misericordia, que escuches mis súplicas por las intenciones especiales que tengo en mi corazón, por las personas que necesitan tu sanación y consuelo, por aquellos que sufren y por aquellos que buscan tu amor y tu perdón. Que la intercesión de San Tadeo sea para ellos un bálsamo de esperanza y un refugio en la tormenta.

Me consagro a Ti, Señor, en cuerpo y alma, poniendo mi vida en tus manos y confiando en tu providencia divina. Que cada acción y cada pensamiento mío estén guiados por tu amor y tu voluntad, y que mi existencia sea un testimonio vivo de tu gracia y tu misericordia, por la intercesión de San Tadeo.

Que tu bendición, oh Dios amoroso, descienda sobre San Tadeo y sobre todos aquellos que le invocan con fe y devoción. Que nos protejas y nos guardes bajo tu manto sagrado, que nos concedas la paz que solo Tú puedes dar y que nos llenes de tu gracia para vivir en armonía contigo y con nuestros hermanos, ahora y por siempre. Amén.