Oh Señor, Dios todopoderoso, te suplico humildemente por la Confrontación del orgullo en mi vida. Reconozco que sin tu ayuda, mi corazón se llena de vanidad y soberbia. Permíteme, Señor, confrontar y vencer todo orgullo que me aparte de tu camino.
Te alabo, Señor, por tu infinita bondad y misericordia. Eres el Rey de reyes y el Señor de señores, y en tu humildad encuentro la fuerza para confrontar mi propio orgullo. Tu amor incondicional me guía y me sostiene en todo momento.
Gracias te doy, Dios mío, por las bendiciones que has derramado sobre mí a pesar de mi debilidad. Tu luz ilumina mi vida y me muestra el camino hacia la humildad. Confrontar el orgullo me acerca más a ti y me hace más receptivo a tu voluntad.
Me arrepiento, Señor, de todas las veces que he permitido que el orgullo se interponga en mi relación contigo y con mis hermanos. Perdóname, Padre, y ayúdame a enmendar mis caminos para confrontar el orgullo y seguir tus mandamientos con humildad y amor.
Te pido, Dios misericordioso, que me concedas la fuerza y la sabiduría necesarias para confrontar el orgullo que habita en mi corazón. Permíteme reconocer mis errores y aprender de ellos, para crecer en humildad y en santidad a tu lado.
Intercede por mí, Virgen María, Madre de la humildad, para que pueda confrontar el orgullo y seguir el ejemplo de tu Hijo Jesús. Te ruego que acompañes mis pasos y me guíes en el camino de la humildad y el amor.
Me consagro a ti, Señor, en este momento de oración por la Confrontación del orgullo. Que mi vida entera sea un testimonio de tu amor y tu humildad, y que en cada acción y palabra refleje tu presencia en mí.
Bendice, oh Señor, mi corazón y mi mente para que pueda confrontar el orgullo y vivir en paz y armonía contigo y con mis semejantes. Que tu gracia me acompañe siempre y me sostenga en los momentos de debilidad. Amén.